Cuando tratamos de ser ordenados y se nos pierde algo de valor lo buscamos angustiosamente: la billetera, el celular, las llaves, etc; pero no hay nada peor que saber que te falta algo y no saber que es. Hoy sentimos que se nos perdió algo, o tal vez algo se nos quedó en el camino. Hoy vemos a la "iglesia" o el lugar de reunión general mas como una liturgia donde la gente va a mirar un espectáculo. En algún momento de la historia se trasformo una reunión de discípulos en algo diferente, aparecieron grupos musicales, bandas, cantantes, en casos extremos: gente extasiada por una producción de colores, con una competencia artística y glamour. Donde quedo el lugar de la comunión simple de los discípulos que se reunían casi "familiarmente", como amigos y compañeros de una fe, un lugar donde se sumaban espontáneamente a medida que llegaban de sus labores, un lugar con "olor" a casa, con discípulos-músicos espontáneos, y en la cual cada uno tenia su espacio para decir "el Señor hizo esto conmigo esta semana". Volvamos a la sencillez
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Ministraciones
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Que así sea, estoy dispuesto.
ResponderBorrarQue así sea, estoy dispuesto.
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