En el Monte Calvario (George Bennard (c) 1913)


No cabe la posibilidad de que exista algún cristiano que no haya sido bendecido por este tremendo himno que fue escrito en 1913 por George Bennard. Este hombre, nació en la localidad de Younstown, Ohio; George era hijo de un hulero estadounidense que falleció cuando el muchacho tenía dieciséis años. Este hecho impidió a George llevar adelante su vocación de cursar estudios para evangelizar pues tuvo que sostener a su madre y a sus hermanas. Su conversión se produjo una vez casado y cuando trabajaba en el Ejército de Salvación. En este organismo él y su esposa llegaron a ser oficiales. Después presentó su renuncia y llegó a ser evangelista con la iglesia Metodista Episcopal, tanto en Estados Unidos como en Canadá. Siguieron a este himno cuarenta y cinco años de ministerio en la vida de Bennard. Durante los mismos compuso muchos otros himnos. Pero ninguno de ellos consiguió llegar a ser tan favorito de los creyentes como éste.Bennard fallecía el 9 de Octubre de 1958 a al edad de 85 años. Como bien dice el libro de Kennth Osbeck:”101 Hymn Stories,” Bennard cambió ese día “la cruz por la corona,” como dice el coro original en inglés. Sus últimos años los vivió cerca de su ciudad natal, en Reed City, Michigan. Allí existe una gran cruz con las palabras grabadas:”The Old Rugged Cross”- Hogar de George Bennard, compositor de este amado himno.
Un conocido cantante evangelista, George Beverly She, en la introducción que hizo en una de sus grabaciones, dijo lo siguiente:”Yo era solo un niño en Winchester, Ontario. Un día, dos cantores de Estado Unidos vinieron a mi casa y pidieron a mi madre que tocase el piano para ellos mientras cantaban un cántico que, dijeron, era nuevo; ”En el Monte Calvario”. Yo estaba perplejo escuchando junto al piano y observando sus caras tal como describían, en este precioso himno, los sufrimientos del Señor. Más tarde yo conocí la maravilla del perdón de Dios.
La mejor forma de saber cual fue el proceso de esta composición es leyendo al propio autor, quien en sus propias palabras lo describía así:” La inspiración vino a mi un día de 1913 cuando estaba en Albion, Michigan. Comencé a escribir “The Old Rugget Cross,” (su titulo original). Compuse la melodía primero. Las palabras que escribí al principio eran imperfectas. Las palabras del himno completo vinieron a mi corazón en respuesta a mi propia necesidad. Poco después fue introducido en unas reuniones especiales en Pokagon, Michigan, el 7 de junio 1913. La primera ocasión en la que se escucho fuera de la Iglesia de Pokagon fue en el Instituto Evangelístico de Chicago. Allí se presento frente a una gran audiencia, y poco después llego ser extremadamente popular a través de todo el país.
Estrofa I
En el monte Calvario se vio una cruz,
Emblema de afrenta y dolor.
Y yo quiero esa cruz do murió mi Jesús
Por salvar al más vil pecador.

Coro
¡Oh! Yo siempre amaré esa cruz.
En sus triunfos mi gloria será.
Y algún día en vez de esa cruz,
Mi corona Jesús me dará.

Estrofa II
Aunque el mundo desprecie la cruz de Jesús,
Para mi tiene suma atracción.
Porque en ella llevo el Cordero de Dios
Mi pecado y mí condenación.

Estrofa III
En la cruz do su sangre Jesús derramó
Hermosura contemplo en visión.
Pues en ella el Cordero inmolado murió
Para darme pureza y perdón.

Estrofa IV
Yo seré siempre fiel a la cruz de Jesús,
Sus desprecios con él sufriré.
Y algún día feliz con los santos en luz,
Para siempre su gloria tendré.

Acapella - The Old Rugget Cross (en el monte Calvario)

Fuente:http://himnos-cristianos.blogspot.com/2008/09/himno-en-el-monte-calvario.html


2 comentarios:

  1. Cuando leo la historia de este himno recuerdo tambien mi historia con este himno, cuando soliamos cantarlos en las reuniones dominicales una y otra vez (que bendicion!), yo me crie en una congregacion donde cantar himnos no era una opcion, asi que entonabamos muchos, muchos himnos y en partiular este. Se acuerdan de ese himno "solo de jesus la sangre"? o "el Rey ya viene" ?

    ResponderBorrar
  2. Al leer la historia que hay tras cada uno de estos hermosos himnos, nos bendice al podemos empaparnos del sentir que los inspiró... cada vez que los entonamos podemos decir, sentir e interpretar unánimes lo que el autor nos transmite en el Espíritu...

    ResponderBorrar

 

SMO

SMO